domingo, 24 de agosto de 2014

Tras el parón veraniego, el Mundial de F1 llega este fin de semana a Bélgica, a Spa, el circuito más desafiante de todo el mundial


            Cuando antaño, los pioneros del Campeonato Mundial de F1 visitaban Spa, todos, y quien dijera que no, mentía,  llegaban a este rutero circuito belga con un nudo en la garganta. Una sensación de presión en la nuez producida, sin ninguna duda, por el miedo y respeto que la pista de Las Ardenas causaba en los atrevidos pilotos que por allí osaban “manejar”.  El Nurburgring-Nordscheleife de 22 km era único, era increíble, pero Spa-Francorchamps, muy cerca del Ring, también lo era, pero éste,  además de imponer… daba miedo.
La antigua pista enlazaba las ciudades de Spa, Francorchamps, Malmedy y Stavelot. Eran 14 km de carreteras locales que se recorrían prácticamente a fondo. De pueblo en pueblo y por en medio del bosque de Las Ardenas. Un escenario único e irrepetible. La salida en si ya era tremenda, en una impresionante cuesta abajo rematada por la rapidísima curva de Eau Rouge, la más difícil de todo el mundial, la subida hacia el Radillon y la recta de Kemmel hasta Les Combes. Una curva muy veloz que desembocaba en una fantástica recta en descenso, la de Masta, uno de esos tramos del circuito que producían escalofríos. La impresionante recta de más de 5 km, tenía baches, saltos y árboles al pie de la pista. A través de ella se llegaba a Stavelot donde la pista giraba a la derecha para ascender hacia Blanchimont y finalmente al cruce de  La Source. Como dijo el doble campeón mundial Jim Clark, cuatro veces vencedor en Spa entre 1962 y 1965, “Spa es un circuito de hombres”. Y así era, o te la jugabas, o no podías correr en Spa. Había que “tenerlos bien puestos” para afrontar el desafío. Había que ser muy valiente, por eso nadie dominó jamás Spa como Jimmy.
El circuito, inagurado en 1925, había visto ganar a todos los grandes ases del automovilismo mundial de antes y de después de la guerra. Antonio Ascari ganó la primera edición de la carrera a mitad de los años 20, y figuras de la talla de  Nuvolari, Caracciola, Lang, Wimille, etc…engrosaron el palmarés de una prueba que iba creciendo en prestigio con el paso  de los años. Cuando en 1950 arrancó el 1er Campeonato Mundial de F1, Spa ya estaba en el calendario. Juan Manuel Fangio y su Alfa Romeo 158 fueron los vencedores. Fangio ganaría dos veces más, como Alberto Ascari, el hijo de Antonio, el primer vencedor en Spa en 1925. Además, también vencerían en alguna ocasión, Jack Brabham, Tony Brooks, Peter Collins, Phil Hill, Dan Gurney, Bruce Mclaren y Pedro Rodríguez.

A la izquierda de la imagen, Alberto Ascari culmina la colina del Radillon tras pasar por Eau Rouge en cabeza del GP de Bélgica de 1952, donde hacía más de 25 años había vencido su padre Antonio Ascari. A la derecha Michael Schumacher hace lo propio tras la salida del GP de 2002.

La carrera de 1960 es considerada como el GP más triste de toda la historia. Durante el desarrollo de la prueba se accidentaron los británicos Stirling Moss, Mike Taylor, Chris Bristow y Alan Stacey. Los dos últimos perdieron la vida en dos accidentes separados que suponen un hecho único en la historia de los Grandes Premios, nunca antes ni después, dos pilotos perderían la vida en el transcurso de una misma prueba.
Spa era demasiado largo y peligroso. A principios de los 70 el GP de Bélgica se mudó a Nivelles y a Zolder, que albergaría la prueba durante más de 10 años. El pequeño circuito de Nivelles-Baulers sólo conoció un vencedor en sus dos únicas ediciones. Emerson Fittipaldi se impuso en 1972 y 1974. En Zolder vencerían campeones de la talla de Jackie Stewart, Niki Lauda, Gunnar Nilson, Mario Andretti, Jody Scheckter, Carlos Reutemann, Didier Pironi, Michelle Alboreto y John Watson. El GP parecía haber recuperado la estabilidad que tuvo antaño.
Pero el 8 de Mayo de 1982, todo cambió, y Zolder quedaría marcado como un circuito maldito para siempre. Durante los entrenamientos oficiales del GP belga, el ídolo de los tifosi Gilles Villeneuve, mientras intentaba batir el tiempo de su compañero Didier Pironi, con el que se había enemistado una carrera antes en Imola al robarle una victoria que Gilles, por lealtad a Ferrari, creía que le pertenecía, se tocaba con el March de Jochem Mass y su Ferrari 126/C2 salía despedido por el aire y Gilles expulsado del monocasco después de un terrorífico impacto contra el asfalto. La F1 perdió ese día  a su príncipe. Nacía así la leyenda del Ferrari número 27, y Gilles se convertiría, junto con Ayton Senna, en el piloto más llorado de la historia del automovilismo.
Gilles Villeneuve saliendo de boxes  en Zolder 82. En su mente sólo un objetivo, batir a su compañero Pironi.  Gilles se accidentaría y no regresaría nunca más al pit lane. Moría el hombre, nacía el mito. 
Y entonces Spa volvió al calendario. El circuito de Las Ardenas se había modernizado, rediseñado,  reducido a 7 km y estrenaba nueva línea de salida y nuevos boxes justo antes del cruce de La Source. Spa había sido recortado por la mitad pero el circuito mantenía gran parte del trazado antiguo (La Source, Eau Rouge, Radillon, Kemmel, Les Combes, Blanchimont…) y lo que es más importante, su esencia, daba la impresión de estar en el mismo sitio que antes y además con las mismas sensaciones. No era un rediseño como el de Hockenheim o Nurburgring que supuso la aniquilación de la personalidad de las mencionadas pistas. Spa, pese a su nuevo trazado, seguía transmitiendo lo mismo. Seguía intacto.
En 1983 Alain Prost a los mandos del Renault RE40 Turbo se adjudicaba la victoria en el nuevo Spa de 7 km, continuado así una ilustre lista de vencedores a los que se añadirían Ayrton Senna y Michael Schumacher con 5 victorias cada uno, Nigel Mansell, Damon Hill, David Coulthard, Mika Hakinen, Kimi Raikkonen, Felipe Masa, Jenson Buton, Lewis Hamilton y Sebastian Vettel.
Sólo falta un gran campeón en esta lista. Spa-Francorchamps se le sigue resistiendo a Fernando Alonso en F1, no así en otras categorías, ya que el asturiano se impuso aquí en F3000 con el equipo Astromega. Alonso, después de una actuación prodigiosa y con tan sólo 18 años,  saldría catapultado de Spa directamente hacia la F1, pero ni con Renault, Mclaren y Ferrari ha podido vencer aquí. Y me temo que este año seguirá sin conseguirlo. Las largas rectas de Spa penalizarán al Ferrari y favorecerán mucho a Mercedes y Williams. Los Mercedes van a ser más fuertes y superiores que en circuitos más revirados como el Hungaroring, pero ojo, en Spa los  Williams van a andar bien, van a ser muy rápidos y tanto Massa como Bottas saben que realmente van a tener una posibilidad de victoria. Después estará Red Bull y Ferrari, pero tanto Mercedes como Williams se deben disputar la primacía en Spa.
Así que el jueves los pilotos llegarán a Spa dispuestos a disfrutar de un escenario único. Para la gran mayoría de ellos es el mejor circuito de carreras que existe. Evidentemente han pasado muchos años y la F1 ha cambiado muchísimo. Nada es igual que en 1925, 1950 o 1970. Pero cuando estos 22 elegidos conductores enfilen la salida de boxes para acelerar en bajada por la antigua recta de meta en dirección a Eau Rouge, volverán a sentir esa sensación de presión en la garganta, saben se la juegan, que delante de ellos hay un desafío tremendo, y que de nuevo, por fin,  están compitiendo… “en un circuito de hombres”. 
Bienvenidos a Las Ardenas. Que gane el mejor.
José Sarrió para Alicantesport.com.

FICHA TÉCNICA
Shell Belgian Grand Prix
Circuit de Spa-Francorchamps

Longitud : 7.004 metros
Vueltas :  44
Vuelta Rápida : 1:47’263  Sebastian Vettel  (2009) Red Bull RB5 Renault

Horarios:

Libres 1 : (22/8) 10:00 h
Libres 2 :(22/7) 14:00 h
Libres 3 : (23/8) 11.00 h.
Calificación : (23/8) 14:00 h.
Carrera : (24/8) 14:00 h.



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